Cahuín: Todos hemos dicho un cahuín alguna vez. Hemos contado chismes o relatos sobre otras personas y muchas veces agregamos mentiras o exageraciones. La palabra es de origen mapuche, y hacía referencia a una reunión de los caciques o loncos, en la que se conversaba de la situación de cada familia. Esto servía para saber las últimas cosas que hacía cada familia. Pueblo chico, infierno grande, dicen.

Cachai: Es otro término que ya es parte de nuestro uso diario y que se refiere a comprender algo. También puede ser usado en remplazo del verbo imaginar: “¡Te cachai que tuviera ese auto!”. Su origen viene del inglés “to catch” que exactamente se refiere a atrapar, pero es usada para referirse a entender o comprender algo.